Cuando muchos autores definen el pilates como un arte, otros especialistas del deporte no pueden más que reírse y decir que la natación también es un arte por ejemplo.
Pero no terminan de entender el concepto de arte, y lo confunden con el concepto de técnica bonita o técnica fina.
En pilates el arte no solo está en la exactitud y la precisión de los movimientos, es como hablar de técnica y arte en el mundo del baile (de donde proceden muchos profesores de pilates como yo misma ). En este mundo el arte y la técnica son dos cosas diferentes, y en pilates pasa lo mismo.
Como define (N.PerezPlata y Javier Solas) en el pilates “Una ha de estar en sintonía con el todo y el todo formar parte de una, y este uno (tu y el mundo) estar en constante movimiento, ser un gato en el bosque, ser un delfín en el mar, ser una nota de música recorriendo el aire”
Tener arte, o fluidez como se llama dentro de los repetidos y conocidos principios del pilates, es lo último que se aprende y lo que nunca se puede llegar a la perfección.
Fluidez, coordinación y la búsqueda de lo sencillo dentro de lo complejo del ejercicio es lo que puede denominarse el arte del pilates.
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